En las revistas de moda como en muchos otros medios de comunicación y publicidad, la era digital significó un giro en la forma de interacción tanto del lector/consumidor con el producto, como del producto mismo. Ya no son los medios tradicionales que alguna vez fueron, aunque se siga conservando en algunos casos, el medio impreso.
La convergencia mediática, que podríamos entender como el ideal del “todo en uno”, como la define Macini, en relación a la unificación de medios en los que se funden los contenidos y la tecnología. Se orienta en la actualidad a la presencia de contenido multimedia, que combina la imagen, el sonido, el texto –antes asociado a diferentes medios–, en todos los dispositivos tecnológicos posibles, incorporando incluso la interacción. Más técnicamente Henry Jenkins (2006) lo define como el “flujo entre múltiples plataformas mediáticas, la cooperación en múltiples industrias mediáticas, y la migración de las audiencias que irán a casi cualquier lado en busca de las experiencias de entretenimiento que quieren”. Pero este mismo autor va más allá, haciendo hincapié en la importancia de la participación y la inteligencia colectiva en el fenómeno de la convergencia. (Fernando Domínguez Hernández. Didáctica de la educomunicación)